El segundo workshop del Centro en Resiliencia Climática (CRC), coordinado por Eurecat, ha incidido en la importancia de priorizar la acción climática en Cataluña de forma colaborativa y concertada, con la implicación de los sectores público y privado y de la sociedad en general, para avanzar en la resiliencia climática, mediante el impulso de la bioeconomía y de proyectos e iniciativas de adaptación al cambio climático y de mitigación, como los sistemas de créditos de carbono.
La jornada, titulada “La Resiliencia Climática en Cataluña: puntos de no retorno, oportunidades, buenas prácticas”, ha incidido en que se está cerca de alcanzar una tasa de subida del nivel del mar de medio centímetro anual, a nivel mundial, con un impacto directo en la costa catalana, donde ya se pueden ver los efectos en las playas y en las infraestructuras del litoral.
En palabras de la directora general de Cambio Climático y Calidad Ambiental del Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica de la Generalitat, Sonsoles Letang, “acompañar a los municipios con herramientas y conocimiento para hacer frente a los impactos del cambio climático es una prioridad de país. La resiliencia climática es hoy la clave para garantizar la calidad de vida, la competitividad y la cohesión de nuestro país”.
“La acción climática ha pasado a ser una prioridad social, económica y ecológica, tal y como lo reflejan los últimos acontecimientos en el contexto Mediterráneo, especialmente la sequía y las inundaciones, así como las olas de calor, que nos alertan de la aceleración del cambio climático y de la necesidad de repensar los territorios y las actividades económicas, desde una perspectiva de resiliencia que integre la adaptación con la mitigación mediante la colaboración entre todos los agentes sociales y económicos”, ha expuesto el director del Centro en Resiliencia Climática, Carles Ibáñez.
Durante el evento, el alcalde de Amposta, Adam Tomàs, ha puesto de relieve la puesta en funcionamiento del Centro en Resiliencia Climática en Amposta y la importancia de la celebración del workshop para incidir en “la lucha contra el cambio climático, desde las vertientes ambientales, tecnológicas y económicas”.
“Seminarios como éste ayudan a consolidar una alianza entre ciencia, territorio y administración, que es imprescindible para hacer frente a la emergencia climática, poniendo la resiliencia en el centro de las políticas públicas”, ha remarcado el secretario de Transición Ecológica del Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, Jordi Sargatal.
La investigación y la innovación para la acción climática
Asimismo, el jefe de la Oficina Catalana del Cambio Climático, Leonardo Bejarano, que ha presentado el Plan Integrado de Energía y Clima de Cataluña 2030, ha apuntado que “la clave ahora es avanzar en la gobernanza climática multinivel y hacer realidad las estrategias locales de adaptación y mitigación, especialmente en zonas más vulnerables a los efectos del cambio climática como las Terres de l’Ebre”.
Diez años después de los Acuerdos de París, “el número de eventos extremos está aumentando”, ha explicado la catedrática de Física de la Atmósfera por la Universidad de Barcelona, Carme Llasat, y ha subrayado que, “la ventana de oportunidades para el desarrollo de la resiliencia climática se estrecha rápidamente, pero todavía tenemos tiempo de actuar. No tenemos derecho a no hacerlo”.
Asimismo, “de acuerdo con los expertos en cambio climático y de Naciones Unidas, esta década es clave para evitar que los impactos del cambio climático afecten de forma irremediable a la economía, los territorios y la salud de las personas”, ha señalado el presidente de Eurecat, Daniel Altimiras.
En este sentido, como ha apuntado el director general de Eurecat, Xavier López, “el Centro en Resiliencia Climática es una iniciativa singular en la que Eurecat ha aglutinado a los ecosistemas territoriales para dar respuesta a retos complejos de la sociedad y de las empresas ante el cambio climático, con herramientas como el despliegue de Living labs en los territorios”.
“La resiliencia climática es una gran oportunidad para transformar nuestro territorio con una mirada humanista y pragmática, que incorpore el conocimiento científico y técnico, pero que también empodere a la ciudadanía y mejore la vida cotidiana de las personas”, ha destacado el director de los Servicios Territoriales del Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica en las Terres de l’Ebre, Miquel Alonso, durante la clausura del workshop.
Buenas prácticas en resiliencia climática en Cataluña
Durante dos días, el workshop ha presentado buenas prácticas en Cataluña en resiliencia climática por parte de empresas, centros de investigación e innovación, administraciones y de iniciativas sociales y ha reflexionado sobre estrategias innovadoras para convertir los retos de la emergencia climática en nuevas oportunidades para la transformación y el desarrollo de los territorios, al tiempo que se da respuesta a los impactos del cambio climático.
Durante las sesiones, se han analizado los retos de la adaptación al cambio climático en Cataluña, la reducción de las emisiones con efecto invernadero y las prioridades de acción climática para el impulso de la transición energética, la movilidad sostenible, así como de nuevos modelos de turismo y de producción agroalimentaria, entre otros.
Asimismo, se han presentado las soluciones, iniciativas y proyectos que el CRC implementa para el fomento de la resiliencia climática, como es el caso del proyecto Bioresilmed para el fomento de la bioeconomía en los paisajes mediterráneos de costa y de interior, mediante el uso de metodologías participativas y de una red de fincas experimentales, que trabaja también en el desarrollo de un esquema de créditos de carbono en arrozales.
Asimismo, en el ámbito de la mitigación, se ha dado a conocer el inicio por parte de Eurecat de los trabajos de campo del proyecto BlauCat, financiado por el fondo climático del Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica de la Generalitat, que analiza el estado del carbono azul en los ecosistemas costeros de Cataluña para evaluar su potencial como imbornales de CO₂ y diseñar estrategias de conservación y restauración, creando una base de datos específica sobre el carbono azul en Cataluña. Se prevé que, a partir de los resultados de sus análisis, la iniciativa puede convertirse en la base de un futuro sistema de créditos de carbono en Cataluña para captar carbono en los sistemas costeros.
Por otro lado, entre otros, se ha compartido el acuerdo establecido entre el Centro en Resiliencia Climática y Nactiva, plataforma colectiva para la protección y regeneración del capital natural en el Mediterráneo, para desarrollar un plan de resiliencia territorial del Delta de l’Ebre que favorezca el impulso de acciones de bioeconomía, economía regenerativa y restauración del capital natural.
El Centro en Resiliencia Climática
El Centro en Resiliencia Climática es un centro de excelencia referente en Cataluña que desarrolla investigación aplicada, herramientas metodológicas y tecnologías innovadoras desde una perspectiva multitecnológica e interdisciplinaria, para hacer frente a los retos que supone el cambio climático. El centro trabaja para catalizar la innovación y transferencia de conocimiento en materia de resiliencia climática para acelerar la transición ecológica hacia el desarrollo sostenible en los territorios, empresas, ciudadanos y administraciones para adaptarse a la emergencia climática. Además, busca contribuir a la implementación de las estrategias compartidas de adaptación y mitigación del cambio climático y transformación económica, así como de las agendas internacionales.
Las entidades impulsoras del Centro en Resiliencia Climática son, además de Eurecat, el Ayuntamiento de Amposta, la Universitat Rovira i Virgili (URV), el Consorcio de Políticas Ambientales de les Terres de l’Ebre (COPATE), el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF, UAB), la Fundación Catalunya La Pedrera (FCLP), la Fundación Empresa y Clima (FEyC), el Observatorio del Ebre, SEO/BirdLife, el Centro Internacional de Investigación de los Recursos Costeros (CIIRC, UPC) y el Instituto Cartográfico y Geográfico de Cataluña (ICGC).